Este post lo escribo con algo de melancolía porque va a hacer hoy un día endiabladamente hostil en Barcelona y parece que todo el fin de semana será así. Lástima de no poder disfrutar de la lluvia fuera de la ciudad, donde realmente es bonito ver llover es en el campo, bueno, en el campo da igual el día que haga, cualquier fenómeno atmósferico es todo un acontecimiento. Acorde con el tiempo que está haciendo, nada mejor que poner un poquito de calidez en nuestras vidas, por ello os traigo dos cocinas donde se ha revestido de piedra las paredes para dar sensación acogedora y confortable. En ambas fotografías se contrasta con elementos de pizarra o hierro que le aportan algo de frialdad pero que casa bien con el estilo rústico de la cocina.
Imágenes de freshome.com
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